Las pequeñas falarias
Los niños y jóvenes de los pueblos fallaires tienen un papel activo en las fiestas del fuego de los solsticios en los Pirineos. Participan en la preparación y durante la celebración de la fiesta. Es un hecho común en todos los territorios y que asegura la continuidad de la tradición.
Andorra
Las fallas de luces son las fallas infantiles. Empezaron en 2005, con la voluntad de iniciar los hijos y las hijas de los fallaires en la fiesta. Son unas bolas de luz que se hacen rodar como las de los adultos, de este modo los niños y niñas aprenden y también disfrutan de la tradición.
Como los más grandes, visten una capa y tienen sus fallaires menores, los cuales presiden la quemada y son los representantes de la fiesta durante un año. Cuando se hacen mayores, celebran el Bautizo del Fuego y continúan con las fallas de fuego.
photo © Fons Associació Fallaires Andorra la Vella
photo © Fons Associació Fallaires Andorra la Vella
Valle de Arán
En el Valle de Arán, los niños también participan de la fiesta. En el pueblo de Les, danzan alrededor de un gran tronco, denominado Haro, el cual se quema en medio de la plaza del pueblo. En Arties, en cambio, este tronco se llama Taro y además de quemarlo lo echan al suelo, lo arrastran y saltan por encima. Los más pequeños tienen una versión reducida del Taro que también tumban y mueven por las calles del pueblo.
photo © Mathilde Lamothe
Aragón y Cataluña
A menudo, los niños y las niñas viven la fiesta con una falla de dimensiones más pequeñas y con un recorrido más asequible, pero igualmente con el fuego como elemento protagonista. Bajan de la montaña haciendo caminos de luz hasta llegar al pueblo. Cuando son mayores se unen al recorrido de los adultos.
Es interesante saber que, en momentos difíciles, como la Guerra Civil o el franquismo, los niños y las niñas fueron los únicos protagonistas de la noche de fallas.
Podéis conocer la experiencia de la María y Mariona, dos pequeñas fallaires de Boí:
photo © Oscar Rodbag
Occitania
Los niños y las niñas son los principales protagonistas de la fiesta. Son quienes queman las halhas y las hacen girar alrededor del har o brandon, un tronco muy alto que también se quema y se sitúa en la plaza del pueblo o bien en las afueras. Tanto las halhas de los niños como el har pueden estar decorados con paja y ramos de flores.
photo © Mathilde Lamothe
photo © Mathilde Lamothe
photo © Mathilde Lamothe
Actividades didácticas para los pequeños
Días y semanas antes del solsticio, algunos pueblos fallaires de los tres estados llevan a cabo actividades pedagógicas relacionadas con la fiesta. En muchos casos, sus asociaciones o ayuntamientos organizan talleres de construcción de fallas y juegos infantiles relacionados con la tradición.
Andorra
En Andorra el colectivo fallaire es muy activo en el ámbito pedagógico, puesto que junto con las escuelas UNESCO realizan talleres y charlas por los centros de primera y segunda enseñanza del país.
Arán, Aragón y Cataluña
Además de las actividades llevadas a cabo por asociaciones y ayuntamientos, en algunas escuelas de los Pirineos como la de Bagà (Berguedà), Sahún (Ribagorza) o Les (Valle de Arán), entre otros, los maestros y las maestras desarrollan proyectos pedagógicos relacionados con la fiesta de manera anual, bianual o de manera puntual. Destaca la escuela Albiol de Sant Julià de Cerdanyola (Berguedà), la cual en el marco del programa “Apadrinamos el patrimonio” de la Generalitat de Cataluña, está inmersa un proyecto sobre fallas desde el 2015, momento del reconocimiento UNESCO. En el siguiente enlace descubriréis todo lo que han estado realizando: www.blocs.xtec.cat
Occitania
La asociación más activa en el ámbito didáctico es Eth Ostau Comengés, la cual, además de sus actividades habituales de divulgación, colabora con las escuelas ofreciendo talleres sobre la fiesta de San Juan. Podéis descubrir sus acciones en su espacio web: www.ostaucomenges.org